Nuestro abordaje combina la integración de los últimos avances en psicología con una relación terapéutica genuina y empática.
A partir de nuestro compromiso contigo y con la práctica basada en la evidencia científica, organizamos la intervención mediante el siguiente proceso:
- Evaluación psicológica. Nos ayudará a comprenderte mejor e identificar las áreas problemáticas, las fortalezas y recursos disponibles, y a guiar el desarrollo de un plan de tratamiento personalizado.
Esta fase de exploración se centra en entender el malestar, las dificultades a afrontar y el contexto en el que se han producido. Con el fin de obtener un conocimiento profundo de las dificultades, podemos complementar nuestra evaluación con cuestionarios que también nos ayudarán a supervisar el progreso en el transcurso del asesoramiento.
- Establecimiento de metas y cronograma. Una vez finalizada la evaluación, pondremos en común nuestras impresiones y acordaremos la dirección más adecuada para la intervención, así como las metas y el cronograma estimado (frecuencia de sesiones, duración, etc.).
La frecuencia de las sesiones será adaptable a tus necesidades y condiciones personales, tanto económicas como de disponibilidad horaria.
- Plan individualizado. La intervención consistirá en llevar a cabo un plan individualizado de trabajo conjunto que nos permita alcanzar los objetivos planeados y evaluar continuamente tu progreso.
- Alta y seguimiento. Una vez hayas alcanzado los objetivos propuestos, analizaremos el trabajo realizado y podremos darte el alta terapéutica. Estableceremos un proceso de seguimiento o acompañamiento si es conveniente.
